Mejora la frenada de tu moto
Con un solo dedo, puedes detener más de 200 kg viajando a cualquier velocidad: aquí tienes el sistema capaz de conseguir este milagro, los frenos.
El sistema más potente que llevamos a bordo y cuyo mantenimiento es fundamental para obtener una respuesta eficaz en situaciones de emergencia. Conocer los límites de de tu frenada y su respuesta cuando le estamos exigiendo todo su potencial es fundamental. Esperar a descubrirlo cuando sea necesario es arriesgarse a que la situación de emergencia acabe descontrolada. Ten en cuenta que en una frenada fuerte, el neumático delantero, que normalmente soporta la mitad del peso de la moto -unos 120 kilos de media- pasa a estar sometido a un peso instantáneo de prácticamente el doble.
¿Cómo están los frenos de tu moto?
¿Has cambiado alguna vez el líquido de frenos?
Aqui te respondemos a varias de las preguntas mas frecuentes en este tema:
- ¿Cuándo debo cambiar el líquido de frenos?
Cada dos años por seguridad.
El líquido de frenos absorbe mucho la humedad ambiental y se degrada con el uso: puedes descubrir que el tuyo está mal cuando lo necesites, al calentarlo bajando un puerto y ver cómo se hunde tu maneta. - ¿Qué latiguillos debo llevar en la moto?
Los latiguillos inextensibles son «eternos» y te recomendamos su uso, ya que los latiguillos originales de goma de muchas motos no sólo nos quitan precisión y potencia en la frenada, sino que al envejecer mostrarán su debilidad ante un uso intensivo. - ¿Cómo puedo mejorar el tacto del freno?
Además de tener las pastillas de freno en buen estado, es importante adoptar una postura correcta. Es muy importante tener el pedal de freno trasero en la posición adecuada para poder accionarlo con el pie derecho sin forzar la postura, además de intentar que la maneta derecha quede a la altura de nuestros dedos cuando extendemos la mano (aflojando la piña o bomba podremos moverla respecto al manillar). - ¿Cuándo debo cambiar los discos de freno?
Desde el momento que percibas que los discos estén alabeados (ya sea por exceso de calentamiento, por un bordillazo o por despiste con antirrobo), ya que darán un tacto inseguro en la maneta y una vibración molesta que no nos permitirá frenar con tanta precisión como deseáramos. También cuando por el uso su superficie sea irregular, ya que se reducirá la potencia de la frenada.
Cómo ajustar los frenos de tu moto
- En una frenada fuerte se ponen en juego fuerzas notables pero que deben ser dosificadas con suma delicadeza a través de nuestras manos y pies. La maneta desarrolla mucho rozamiento y si no está bien lubricada, su movimiento no será suave, y eso se traducirá en una frenada imprecisa y desagradable. TRUCO: Aplicar algo de grasa (mejor con base de cobre) a las superficies en contacto y al perno o eje.
- ¿Te gusta la maneta lejos o cerca del manillar? Para conducir con eficacia hay que estar a gusto, y la mayoría de las motos permiten este reglaje, que realmente es muy personal. Conviene probar un par de puntos para estar seguros de que cómo la dejamos es realmente como mejor nos sentimos para frenar. CONSEJO: Una maneta cercana al puño que puedas accionar con todos los dedos te ofrecerá más sensaciones y seguridad. Sin embargo, la mayoría de las deportivas actuales tienen un mordiente tan alto con poca fuerza que con uno o dos dedos es más que suficiente para conseguir fuertes frenadas; en ese caso conviene separar la maneta del manillar porque si no podemos «pellizcar» los otros dedos.
- También el pedal de freno debe estar a nuestra medida. Si está demasiado alto o bajo, no podremos dosificar bien la frenada de detrás y, en caso de necesidad, será fácil bloquear esa rueda y que en lugar de ayudar a la frenada, sea otro problema del que estar pendiente y que nos desestabilice.
Ten estas recomendaciones en cuenta.
Piensa que el sistema de frenada de tu moto puede ser lo mas inportante, en cuanto a seguridad se trata.
Fuente: Motociclismo